PASO 1: Investigo
Investigo mi identidad digital metiendo en un motor de búsqueda nombre y apellidos. Entiendo la identidad digital como el conjunto de características que me identifican
dentro de la red y que dejo de forma consciente o inconsciente en mi paso por internet.
Los resultados públicos que me devuelve son blog de ámbito educativo creados por mí y
acompañado de fotos y vídeos de actividades que hemos realizados. También aparecen artículos de periódico donde se recoge mi nombre. No hay fotos de mi persona.
Atendiendo a la clasificación de los tipos de datos por los que está formada la identidad digital de Antonio Omatos y Victor Cuevas, mi
identidad digital carece de datos formales, informales o imaginarios. Mi
identidad digital está formada por datos reales, cierto y objetivos que
corresponden a entradas de blog con actividades de tipo educativo que se
realizan periódicamente y se publican. Así como noticias de periódico.
PASO 2: Objetivos
El perfil de mi identidad
digital es laboral con datos reales. La imagen que veo de mi misma en internet en estos momentos
es la que me gustaría seguir teniendo, relacionada con la educación y la publicación de contenidos para la formación del profesorado. Tengo que hacer algunas modificaciones. En las búsquedas que realizo no aparece mi imagen social.
PASO 3: Distanciamiento
Al realizar una labor de distanciamiento e imaginar que no me conozco veo a una persona que:
- ha recibido dos premios Joaquín Sama de
Innovación Educativa
- tiene un blog de aula y algunos blogs de
proyectos donde publica las actividades.
- realiza publicaciones de carácter educativo.
PASO 4: Privacidad
Después de este paseo por la red mirándome desde fuera creo que debo hacer algunos cambios en la gestión que hago de mi privacidad. Hay algunas cosas que he visto que no me gusta que aparezcan. Me ha sorprendido otras que no sabía que aparecían y que
no tienen consentimiento para hacerlo. Me pondré en contacto con los administradores para eliminar esa información.
Debemos tener mucho cuidado con los comentarios que realizamos, hay que publicar con cabeza, compartiendo
los archivos con las personas adecuadas.
Al publicar perdemos el control sobre eso que publicamos.
Imagino que me avisan de que todo lo que he compartido de forma privada
y anónima mañana se hará público y llevaría mi nombre y apellidos. En mi caso borraría algunas cosas y revisaría bien todos los permisos.
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